Apático regionalismo argentino

Por Gustavo E. Barbarán | 04/05/2025

En “Geoestrategia de la Región del Norte Grande Argentino”, publicada en este Foro el 15/08/2020, presenté una Argentina partida en tres: 1- la Región del Norte Grande (RNGA), con deplorables indicadores de desarrollo humano; 2- una franja media compuesta por cinco distritos, porción del «cuerno de oro» suramericano (ese que desde Belo Horizonte baja por la costa brasileña, pasa por el eje Montevideo-Buenos Aires-Rosario y concluye en Santiago-Valparaíso), y 3- la despoblada Patagonia andino-marítima, cuya vertebración pende de los hidrocarburos de Chubut y Neuquén.

El debate sobre la “cuestión regional” en Argentina -y en todo el mundo- es antiguo; tuvo variadas formas de abordaje y resultados disímiles.

Regionalización en Argentina

En otra ocasión (“Salta y las regiones ante el modelo liberal-libertario” – El Tribuno, 25/01/2023) aludí al sustancioso ensayo “Geografías regionales en la Argentina” -rescatado en https://www.ub.edu/geo crit/sn/sn-127.htm- de la geógrafa Silvina Quintero. En ese trabajo la autora expuso que, en la primera mitad del siglo XX, la división regional argentina se resolvió con unidades geográficas que no agrupaban provincias en un nivel intermedio del Estado nacional, sino como “espacios alternativos” a las divisiones provinciales, nunca con rango de unidades político-administrativas. Existe consenso – señalaba- sobre la valiosa diversidad ambiental que contrasta con disparidades socioeconómicas y poblacionales; a la vez, distintas perspectivas historiográficas procuraron “interpretar conflictos no resueltos del proceso social argentino: el despoblamiento y las distancias, los antagonismos litoral- interior o provincias-Nación”. Las políticas territoriales, que pretendían solucionar “los desequilibrios sociales internos, apelaron con fuerza a las teorías regionales, y a pesar de su escaso éxito dejaron en el mapa argentino algunas huellas de sus regionalizaciones”. Así se definieron las tradicionales ocho regiones geográficas aleccionadas en las escuelasi.

Quizás sea tiempo de encarar además una visión regionalista “tridimensional”: provincial, subnacional (RNGA, Cuyo, etc.), internacional (sea subnacional -Zicosur- o continental -Unasur, Mercosur-). Refuerzo esta percepción con lo de A. Methol Ferré: “La geopolítica es perspectiva global de la historia en la dinámica de los espacios” (Los Estados continentales y el Mercosur. Ed. HUM, Montevideo – 2013). Eso acontece en este siglo oceánico y espacial, en un mundo en fase multipolar mientras la globalización se regionaliza. Corresponde, pues, repensar la Argentina según la dinámica de nuestros espacios y en función de un polo suramericano, hoy apenas un boceto sobreideologizado.

La reforma constitucional de 1994 dio un giro significativo al proponer en el art. 124: “[…] crear regiones para el desarrollo económico y social y establecer órganos con facultades para el cumplimiento de sus fines […]”. Subyace el propósito de consolidar la integridad territorial, sostener el federalismo, reafirmar identidades culturales e incentivar el desarrollo integral de nuestros pueblos. Asimismo, entre las facultades del Congreso Nacional, está la de proveer el crecimiento armónico, poblamiento de la Nación y promoción de políticas diferenciadas para equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones (art. 75 inc. 19). Ambas mandas se complementan -y potenciarían- en tanto hayamos definido objetivos estratégicos de mediano y largo plazos.

Hasta ahora, y por orden de aparición, existen cuatro tratados parciales de integración interprovincial con sentido geográfico, celebrados por la misma época:

  • Tratado de Integración Económica de la Región de Nuevo Cuyo (San Juan, 22/01/1988), entre La Rioja, Mendoza, San Juan y San Luis, para fortalecer la vida democrática y reafirmar el sistema federal de gobierno “en el marco de la profunda crisis producida en las economías regionales y de la coyuntura internacional que dificulta un crecimiento integral, armónico y participativo del País y de la Región”. A mediados de 2012, La Rioja se retiró para incorporarse al NOA.

Su estructura orgánica cuenta con una Asamblea de Gobernadores asistida por un Comité Ejecutivo y una Secretaría Técnica con asesoramiento del CFI. Estas provincias habían establecido en 1977 una Corporación Financiera Regional del Oeste, a fin de reactivar la economía regional, con directorio en la capital sanjuanina. Su estatuto se readecuó a fines de 2014, pero no hay registros de actividades.

Esta región carece de página oficial, por tanto la búsqueda de información deriva a portales oficiales de cada provincia o del gobierno nacional.

  • Tratado Fundacional de la Región Patagónica (Santa Rosa, 26/06/1996), celebrado entre Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Según su texto «La región tendrá como objetivo general proveer al desarrollo humano y al progreso económico y social, fortaleciendo las autonomías provinciales en la determinación de las políticas nacionales, en la disponibilidad de sus recursos y el acrecentamiento de su potencial productivo […]». La instancia máxima de conducción política regional es la Asamblea de Gobernadores y cuenta con un Parlamento regional con representantes de todas las legislaturas. Tampoco tiene página oficial en donde averiguar sus acciones.
  • Tratado de la Región Centro, suscripto el 15/08/1998 entre Córdoba y Santa Fe en un paraje interprovincial sobre la RN 19; Entre Ríos se incorporó en abril de Tiene por finalidad promover el desarrollo humano, económico, salud, educación, ciencia y cultura.

Conduce una Junta de Gobernadores, un Comité Ejecutivo como órgano de implementación, una Comisión Parlamentaria Conjunta en tanto instancia deliberativa, y una Secretaría Administrativa coordinadora. Cuenta con una página oficial (https://www.regioncentro.gob.ar/institucional/) que expone sus tareas.

  • Tratado de la Región del Norte Grande Argentino (Salta, 09/04/1999). Involucra a las seis provincias del NOA (Catamarca, Jujuy, La Rioja, Salta, Santiago del Estero y Tucumán), más las cuatro del NEA (Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones). Su objetivo central es articular la integración de NOA y NEA, a través de “un sistema efectivo de consenso y acción conjunta” entre ellas. Cuenta con la Asamblea de Gobernadores, Junta Ejecutiva y el Comité Coordinador (integrado por dos miembros de la Junta Ejecutiva, representando al NOA y al NEA). Se instituyó también el Parlamento del Norte Grande, con otra Junta Ejecutiva integrada por los vicegobernadores de las diez

El portal del Consejo Regional del Norte Grande Argentino -https://nortegrande.net.ar/- permite conocer la dinámica de la región.

Pese a sus esfuerzos, las provincias regionalizadas no han superado su condición de foros de reproche a la burocracia central. La situación no cambiará sin proyectos estructurales geoestratégicos, que converjan en una visión geopolítica nacional.

La única verdad es la realidad

De hecho, aquellos cinco distritos mencionados al principio -llamémoslo D5- concentran casi todo: Buenos Aires, CABA, Córdoba, Mendoza y Santa Fe, aparte de las cifras señaladas en la tabla siguiente, representan -a 2020- más del 70% del empleo privado, el 75% de las empresas privadas y el 83% de los depósitos privados. La superficie de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es de 203 kmZ y la del AMBA (CABA más veinticuatro partidos bonaerenses para el INDEC) 3.833 kmZ; o sea que en el 0,1 % de la superficie continental argentina reside alrededor del 40% de la población.

Nuevo Cuyo Región Patagónica Centro RNGA D 5
 

Superficie

312.226 kmZ

(11,5% nac.)

930.638 kmZ

continentales (33% nac.)

377.109 kmZ 849.563 kmZ

(30,6% nac.)

752.932 kmZ

(27% nac.)

 

Población

3.408.462  hab.

(7,4% nac.)

2.981.912  hab.

(6,5% nac.)

8.812.239 hab. 10.087.709 hab.

(21,8% nac.)

26.953.349

(58,3% nac.)

Densidad 9,1 hab./kmZ 1,47 hab./kmZ 20,3 hab./kmZ 9,3 hab./kmZ s/d
PBG 5,6% 10,5% 18% 12% 71,5%
Exportaciones (del total nac.) 1,4% 6,5% 3,3% 6,6% 70,3%
Diputados nac. 21 30 46 65 142 s/ 257

(55%)

Senadores nac. 9 18 9 30 15

El porcentaje de kmZ se tomó solo sobre los 2.780.085 kmZ continentales.

 

Los guarismos expuestos revelan el insensato desequilibrio que la Argentina arrastra desde hace 150 años, y sigue profundizándoseii. Desagregados por provincia, excepto las del D5, los resultados son más preocupantes si consideramos nivel de pobreza, desnutrición y mortalidad infantil, analfabetismo, desempleo. Agrava la situación nuestra demografía, por la peligrosa caída de la tasa global de fecundidad en todo el país: 1,8% la media nacional frente al 2,1 que asegura el recambio generacional.

¿Cómo revertir esta añeja problemática?

¿Para qué regionalizar? Reiterando lo expuesto en reciente ocasión (https://www.eltribuno.com/ opiniones/2025-3-21-0-0-0-regionalizacion-de-salta-un-aporte-al-desarrollo), regionalizar constituye un fenómeno histórico, geográfico, geológico, demográfico, económico-social, político-institucional, sociológico, que requiere un enfoque multidisciplinar con el objetivo de alcanzar un equilibrio territorial que afiance, además, la estabilidad institucional con nueva y equitativa distribución del poder nacional.

Expongo, para finalizar, otra atinada frase, esta vez de Héctor Giuliano: “la geografía inclina pero no impone un curso a la historia”; en efecto, ese derrotero regionalista presupone una construcción en común. Entonces, a la Región Patagónica le toca sostener la integridad territorial de ese enorme espacio vacío y, a la vez, promover nuestros intereses marítimos y antárticos. Las regiones Centro y Cuyo son bisagra articuladora entre Patagonia y RNGA; y al Norte Grande le cabe afianzar la integración horizontal de las provincias del NOA-NEA, fundacionales de la Nación (castigadas por el diseño etnocéntrico portuario que dividió al país), a fin de articularnos con Suramérica.

El tren de la Historia está en movimiento y nosotros no terminamos de abordarlo obnubilados por dogmas e ideologías. No quedemos en el andén: agua pasada no mueve molino.

NdA. Las referencias demográficas corresponden al Censo 2022, que figuran en páginas del INDEC. Los PBG fueron tomados de la CEPAL (https://www.cepal.org/es/publicaciones/47900-desagregacion-provincial-valor-agregado-bruto-la-argentina-base-2004). Otros datos se tomaron del portal https://www.argentina.gob.ar/.